lunes, 3 de diciembre de 2007

El existencialismo se equivocó

El existencialismo se equivocó. No es una denuncia fundamental la que declara que cuando creo que no elijo, elijo no elegir. En una me arriesgo y digo: es trivial. No toda decisión es importante y está demostrado que la elección supone una actitud vuelta sobre sí que no es posible a cada instante, si además se pretende dar lugar a la experiencia; esto es: si se quiere una vida que tenga en cuenta algo más que lo propio. No quiero irme por las ramas, así que vuelvo a lo que me convoca. No toda decisión es importante y esto no quiere decir que todo lo que hago no me determina, si no que no todo de igual manera. A ver si un ejemplo aclara.
Yo no quiero ser Amélie. De hecho, me da miedo ser Amélie. Su vida de literatura, encantadora a simple vista, en mis términos, es de superviviente. De quien se construye un mundo que conoce, lleno de sentidos que no puede no disfrutar. Como en ese mundo entra sólo lo que le gusta, la felicidad viene de suyo: encuentra lo que puso, no es ningún misterio; no hay tesoro, no hay sorpresa. Fundamentalmente lo que hay es miedo y, de la mano, soledad. Amélie no me da ternura, me irrita con su cuidado.
Es claro que sólo nos da temor la fiera que puede atacarnos. Puedo ser una persona muy precavida y por eso digo, también, que no toda decisión es tan fundamental. Es paradójico, quizá, pero para vivir bien hay que dejarse vivir un poco. En algún sentido creo que puedo sostener-y esto no es una apología- la idea de que un poco de dolor es deseable.


Nota al pie: Es muy probable que esto esté lleno de agujeros argumentativos, no sean rigurosos, por favor.

18 comentarios:

Libelula de Acero dijo...

Desde varios principios psicológicos, que nada tienen que ver con el existencialismo (o si?) se desprende que la intensidad del dolor experimentado es directamente proporcional a la felicidad subsiguiente. Al menos en cuanto a revisionimos propios se trata.
Amelié juega seguro y juega es la palabra clave.
El dolor puede ser deseable, siempre que venga con promesas de finiquitud.

O así lo veo yo.

A. dijo...

Curioso: yo estaba por escribir "Contra Sartre", iba por otro lado igual. Acuerdo con que no todas las decisiones tienen la misma relevancia. Ahora, ¿cuál es la relación que encontrás entre el dolor y el dejarse vivir? ¿Pensás que reflexionar es cuidarse? ¿El cuidado sólo tiene que ver con la reflexión?

paula dijo...

¿qué pensás de los psicólogos?

alfonso dijo...

En defensa de Amelie.
No es que no esté de acuerdo con tu tesis principal, pero creo que podemos interpretar a Amelie de otra manera: durante toda la película esta muchacha me pareció un personaje de ciencia ficción bastante imposible y con algo indescifrablemente molesto. Como dice libélilula de acero, Amelie parece jugar seguro; pero no tenemos que olvidarnos que hay una escena en que toda la magia cae terriblemente ante el dolor: la escena en que Amelie llora de amor (de dolor por amor) en la cocina. No me acuerdo bien la trama de ese momento (creo que el gato le tira abajo la fantasía), pero sí me acuerdo de haber pensado "Ah, no es tan boluda, tiene sangre" o alguna estupidez así. Podemos pensar entonces que Amelie nos muestra en ese momento el fin de toda fantasía, de toda guarida de infante terrible donde elegimos los sentidos, ante lo irremediable del mundo (que no elegimos). Por supuesto esto después cambia y final feliz bla bla bla...
Perdón por la extensión. Disfruto mucho de vuestro blog. Saludos.

Anónimo dijo...

libélula: creo que yo tb tiendo a pensar eso del dolor; lo que pasa que no convence. parece que para hablar de felicidad hay que hablar de sufrimiento y que el que no sufre no es auténticamente feliz: esto es lo que no me cierra aunque, la verdad, me cuesta mucho evitar o encontrar la alternativa.
a: primero, tampoco taaaan curioso. me parece que por miedo al dolor se sobrevive, se encuentra lo que se puso ya y eso no es "dejarse vivir" (que no sé de dónde lo saqué y me da un poco de cosa...)
no unía lo de la reflexión al cuidado, directamente por lo menos, nada más la traje por sartre, creo. seguro que el cuidado no tiene que ver "sólo" con la reflexión pero aseguro esto con el mismo énfasis que digo que nada tiene que ver sólo con nada. en fin, no sé en qué estás pensando.
pau: nada bueno.
rober: sí, te hiciste entender (al menos la primerta parte). claro que cuando la precaución nos deja solos es peor el remedio que la solución; lo que pasa que para mí siempre cuidarse te deja solo y no cuidarse te hace doler...entonces no sé. es seguro que no sé.
alfonso: no me acordaba de esa escena, mejor por Amélie. mi interpretación es una simplificación media trucha y sobre todo a partir de que me irrita mucho esa vida de colores lindos cuando es obvio que es una persona muy triste y no por que está sola, si no por que no puede no estarlo, por que tiene miedo.
¡saludos tb y gracias!

Anónimo dijo...

Yo soy Amelie. Más bien, puedo serlo con mucha facilidad y encima me da muchísimo placer; rodearme de sentidos que pongo en las cosas y sorprenderme cuando esos sentidos reaparecen "mágicamente" en nuevos encuentros inesperados. La vida en colores fuertes y que encima, combinan.

Ahora, por otra parte entiendo lo que decís y es medio horroroso ser Amelie todo el tiempo. No lo sé. A mí me gustó la película.

No me tomes muy en serio de todos modos ;)
Matías

Juan Dé dijo...

Amelie ha muerto, pero es un cadaver hermoso. maldita. está maldita, porque es linda pero no erotiza. está muerta. será por eso que decís: no hay tesoro, no hay sorpresa.

Dante Bertini dijo...

dolor psíquico, espiritual?
el dolor físico, el no buscado, es siempre no deseable.

De los rubios dijo...

matías: te tomo en serio y te mando un saludo con mucha simpatía
juan de: y sí, es un poco eso. no sabía que amélie no erotizaba...
cacho: no estaba hablando precisamente de dolor físico que, en principio, no es deseable aunque podría haber algún dolor físico no buscado que diera satisfacción: no se me ocurre bien en qué estás pensando.



vero

Anónimo dijo...

Me gustó mucho esto que escribiste, Vero (es de Vero, no?). Lo tendría que leer varias veces más y pensar varios días para decir hasta qué punto estoy de acuerdo o se me aplica o me cierra. Pero la primera lectura me hizo sentir bien, y me hizo sentir menos sola.
Me acuerdo la primera (y probablemente única) vez que leí algo del existencialismo. Me gustó porque yo era adolescente y me dio una sensación de poder, la ilusión de que a fin de cuentas mi vida podía depender un poco de mí. Ahora no sé si éso es un consuelo.

El sábado me mordió un perro, Vero. Pensé en todos los perros que odio y pensé en que el último perro que quise fue Chispita en tu cumpleaños. Me reconcilié un poco con su especie.

Te mando un beso y perdón si me excedí. No estoy muy acostumbrada a hablarle a una amiga por este medio cuasi-parasitario llamado "comentario".

Voy a leer más seguido el blog, que me gustó mucho.

De los rubios dijo...

luu: qué bien que estás por acá!
la primera vez con sartre creo que fue en 4°, no? hay cosas por decidir, de cualquier modo.
qué mal que te mordió un perro, no dudo de que te has dado la antirrábica.
te quiero mucho yo tb y te espero por acá cuando quieras.

vero

LUGAR ANARQUICO dijo...

FISHBOY POSTEA EN LUGAR ANARQUICO

Playmobil Hipotético dijo...

me tomo el atrevimiento de reclamar la escritura de la señorita roberta.

Anónimo dijo...

Esta Muerta.

Anónimo dijo...

Bueno, no jodan.
Aparte de que est{a muerta y de que tengo que hacer dieta, ¿alguna notica de ms rober?

Anónimo dijo...

Si, gracias...
... de que no estabas muerta me enteré cuando se me prendió la lamparita de ir a ver las novedades en Dvilo, hace un par de días...
...gracias también por mantener una sana higiene respecto de los comentarios y haber borrado el anterior nro 20, a quien lo haya hecho...
En caso de que no nos veamos, feliz dia, semana, mes y año!!

Anónimo dijo...

Me encantó el post. Pensar que no toda desición es importante te da un toque sano poder.

Lautaro dijo...

che qué están muertas o en mar del plata o què?